Análisis Político

La 4T y el poder autoritario

Si bien estamos lejos de una dictadura y de un caos económico con fuga de capitales, inflación, devaluación y caída del poder adquisitivo de los trabajadores, lo cierto es que llevar una transformación económica, política e institucional ha resultado complicado por el mismo proceso en el que se ha desenvuelto el país.

La corrupción, los privilegios y la sobre explotación salarial creó una estructura solida de una clase empresarial y de políticos que controlaron no solo el poder judicial si no el corporativismo laboral, todo controlado por el estado representado por ese grupito neoliberal y enfrascado ahora en una lucha radical entre la política humanista del presidente y la política de la elite empresarial y política del país.

La lucha política si bien se polarizó al grado de que un 30% de la población no está de acuerdo con AMLO, muchos lo odian, ofenden y salen a las calles a manifestarse.

Perooo, casi el 70% de la población sigue ciegamente al presidente a pesar de continuar con resultados económicos nulos y solo una redistribución del ingreso que ha significado una recuperación del salario mínimo de casi el 100% y las pensiones.

Es más fuerte el discurso político que los resultados económicos, es más el autoritarismo que una dictadura, es más una fe ciega que un razonamiento objetivo, y esto ha provocado más odio y polarización política que acuerdos sensatos y beneficios para todos, producto de la polarización, por eso era importante para el presidente desarticular el Poder Judicial y sobre todo a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), porque era la fuerza de la oposición y la obstrucción al cambio.

Por eso pidió a gritos el presidente votar por la 4T, por la mayoría calificada, para imponer su proyecto económico y político para tener el control total de las instituciones.

No es casual toda la fuerza que le ha dado al Ejército y la Marina y la incorporación de la Guardia Nacional a la SEDENA. Se trata de controlar todo, me atrevería a señalar se pretende controlar a la delincuencia organizada y el narcotráfico.

Hoy la democracia es válida como medida de expresión y todo se vale, pero sin que se salgan del huacal: Decía mi apá aquí en mi casa hay libertad, todos opinan, pero se hace lo que yo digo, así de fácil.

 Si no que les pregunten a los morenistas que están peor, les imponen todo y ni los pelan, ahí está la convención nacional, la línea estaba dada, Luisa María Alcalde para presidenta del CEN y el bodoque de Andy para la Secretaria de organizaciones sociales, y si se apendeja el pueblo va para presidente en el 2030, aunque está cabrón, si se deja el changoleón de Noroña.