El agandalle de Richi de TV Azteca.
Cuando el poder enferma es capaz de hacer lo que sea hasta conseguirlo.
Hoy Ricardo Salinas Pliego, dueño del grupo de empresas dentro de la que destaca TV Azteca, se encuentra en el ojo del huracán de los medios.
Poseedor de una gran fortuna y considerado como el segundo hombre más rico de México, es señalado en la mañanera por el presidente por negarse a pagar al SAT los impuestos que corresponden a su grupo empresarial de 2008 a 2018 por 63,000 millones de pesos y recargos que han ido generando por 53,000 millones de pesos en 17 juicios de 4 empresas.
Y lo anterior pese a que le han condonado 7,775 millones durante los gobiernos de Felipe Calderón y Peña Nieto.
Pero su hambre de riqueza y poder no tiene llenadera. Mientras los demás empresarios se disciplinaron cumpliendo con sus obligaciones fiscales a él le ha valido madre rotundamente justificando que el gobierno es corrupto y que los funcionarios deberían subir sus declaraciones detallando sus propiedades y residencias ya que son unos cavernícolas.
Aquí no está en tela de juicio si hay corrupción en el gobierno ni tampoco es justificación para no cumplir con las obligaciones fiscales. Lo cierto es que para que cualquier gobierno pueda cumplir con las necesidades que existen en un país es necesario tener recursos para cumplir con ellas, como lo es infraestructura, educación, salud, apoyos productivos y sociales
Pero es necesario poner en dimensión el impacto del adeudo de Richi de 63,000 millones de pesos. Con ellos se podía apoyar a la creación de pymes (pequeñas empresas) con un apoyo de 100,000 pesos con el compromiso de generar 3 empleos tendríamos 63,000 nuevas pequeñas empresas que generarían un millón 890 mil empleos, una cantidad nada despreciable para cualquier economía.
No hablamos de cualquier cantidad de dinero y lo que es más impactante es el hecho de que anteriormente se condonaron impactantes sumas de dinero.
En el gobierno de Felipe Calderón, 121,891 millones de pesos y con Peña Nieto el doble, 244,283 millones de pesos.
Así lo señalo también el presidente en la mañanera, de ahí que se modificara la Constitución para que no existiera ningún motivo para condonar impuestos ya que esta situación era facultad del presidente y ahora se suprime definitivamente.
Se imaginan el moche que existía para el presidente, ya que no creo que haya sido de gratis y lo que esto representaba para los mexicanos en recursos que no llegaban y que podrían ser abonados al Fobaproa o en la inversión a la salud.
Realmente es un tema además de reprobable que no debe de tolerarse. No podemos construir un país con tanta diferencia social. Hoy somos el 4to país con más ricos en el mundo y obvio con más pobres, nada más 60 millones de mexicanos.
Mientras en este país no exista justicia seguiremos con pobreza y un estancamiento económico prolongado.
Hoy hemos dado un paso, iniciamos un cambio favorable, pero debemos luchar por un cambio radical, por una vida digna para todos los mexicanos dentro de un marco de verdadera justicia.
Quién deba algo que lo pague, no más injusticias económicas y sociales.