La resistencia al cambio, al poder, los privilegios, la demagogia de la democracia y la manipulación política.
Después de seis años de obstáculos en las reformas constitucionales a un proyecto de gobierno llamado como la 4T, se decide eliminar el cuello de botella, es decir reformar al Poder Judicial vía democráticamente.
La justificación del gobierno morenista fue: el sistema judicial y la Suprema Corte de Justicia de la Nación se pudrieron, se corrompieron, no imparten justicia solo protegen a los ricos y apoderados, al narcotráfico, a los inversionistas y a los grandes empresarios, al pueblo ni lo pelan.
Totalmente cierto, una impunidad del 90 %, una inseguridad brutal, total no hay justicia.
Un verdadero caos de impunidad y para acabar un sistema de privilegios a jueces y magistrados con sueldos excesivos y ofensivos al pueblo. Un coctel que dinamita las esperanzas de un pueblo al derecho de cambiar y mejorar.
Estábamos acostumbrados al autoritarismo y la imposición de un sistema político gobernado principalmente por el PRI y secundado por PAN que pareciera normal, el empobrecimiento de la clase trabajadora y la corrupción descarada dentro del gobierno.
Peroooo, sobre todo de la impunidad a los delincuentes de cuello blanco y de cuello sucio, es decir de la delincuencia organizada y los narcotraficantes, todos ellos blindados por el PRIAN y su política de silencio y demagógica cuando hablan de democracia, por un lado, y por el otro se imponen a las reformas en contra de los
mexicanos y en cambio apoyan privatizaciones, saqueo de las arcas públicas, topes salariales, Fobaproa, ahí si había democracia política, y el pueblo que se jodiera.
Ahora con un proyecto que beneficia al pueblo, que elimina privilegios, excepciones de impuesto y busca un sistema de justicia más justo, ahora el gobierno es una dictadura, es autoritarismo, es injusto y va contra la democracia y las leyes, es un caos jurídico y constitucional este país va a la quiebra.
Falso, puro palos de ciego, se acostumbraron al autoritarismo que no saben discutir en la democracia, a los privilegios y a esconderlos, que ahora no saben que decir. Se acostumbraron al mayoriteo y el engaño, no entienden que la supremacía en la Cámara de Diputados y Senadores es legal y es parte de la democracia porque el pueblo lo decidió, no se puede privilegiar a una minoría acosta de una mayoría.
El hecho de aceptar una discusión con la oposición no quiere decir que se va aceptar la resolución de una minoría, ya basta de engañar, mentir e imponer privilegios, la ley es clara, el pueblo manda aunque esté engañado y equivocado y quedó claro en el proceso electoral de junio pasado.
Con esa mayoría ganada en las urnas se tiene el derecho de modificar la Constitución a su beneficio y antojo, así lo marca la Constitución.
Pero los privilegios, el poder y la corrupción no la quiere soltar el grupo que se ha apoderado del país, representado por el PRIAN y un sector empresarial dirigido por Claudio X, el junior tóxico, dijera Sheinbaum. Están acostumbrados a una clase rica y un pueblo pobre que les sirva.
Ya basta de manipular la ley a su favor, de discursos democráticos e imponer un marco legal injusto.
Si bien la 4T no es un billete de lotería para todos, sí es un cambio que puede representar un rumbo con más beneficios si se corrigen muchos vicios y se alcanza un verdadero desarrollo para el país, pero esto es otro cantar.