Análisis Político

La condena en EU a Genaro García Luna. ¿Qué sigue o qué debería seguir?

No pasó nada, se esperaba condena perpetua a Genaro García Luna y sólo fueron 38 años que seguramente le abrirá la puerta a una negociación para convertirse en testigo protegido.

Esto no termina hasta que se acabe, pero lejos de esta sentencia existen demasiados elementos que involucran a las  autoridades mexicanas y estadounidenses. Cierto es que existían trabajos de cooperación y estaban involucrados con los carteles del narcotráfico, es obvio que el “burro” de Vicente Fox lo sabía y participaba de lejitos para no quemarse, lo mismo que Felipe Calderón (el borrachín, según Noroña) y se llevaban su tajada.

Era un secreto a voces, el mismo Gerardo Fernández Noroña lo señalaba en la Cámara de Diputados. Y no solamente operaba García Luna, si no también parte de su familia que trabajaban y operaban con él, además de ser una estructura bien conformada de espionaje y control político, misma que seguramente sigue trabajando. Recordemos que durante el sexenio de Peña Nieto fungió como proveedor del gobierno.

Hoy nos muestran una pequeña parte de García Luna, perooooo esto va más allá de una participación con el narcotráfico. EU busca información del exsecretario calderonista que pueda utilizar como presión política. Los gringos no dan paso sin huarache, consideran que podrían estar involucrados expresidentes mexicanos, integrantes del Ejército, la Marina y del lado americano miembros del gobierno estadounidense y de la DEA.

El negocio de la droga es multimillonario, es en dólares. La multa que le impusieron a García Luna de 2 millones es la morralla de las transacciones, no es casual que llevamos 24 años de crisis de seguridad pública con un control total del narcotráfico. Vivimos en un narco estado con un gobierno de políticas mediocres y de apariencias, con discursos revolucionarios y de resultados nulos.

Lo demuestra el juicio en Estados Unidos contra el ex super policía, García Luna. Un gobierno mexicano que le va y le viene, los partidos políticos exigiendo a Felipe Calderón que aclare y una sociedad que en el fondo le vale morder.

 Hoy según tenemos en México un gobierno de una revolución pacífica, pero con los mismos protagonistas y sin resultados reales, sólo de discurso. Vivimos una simulación de transformación en todos los ámbitos porque a final de cuentas a todos les vale.