“La guerra contra las drogas ha fracasado y tenemos que buscar ideas nuevas. El control y la legalización pueden ser mejores que la mera represión”, consideró Eva Chen, miembro del consejo de Berna del Partido Alternativo de Izquierda.
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Autoridades de Berna, la capital de Suiza está analizando poner en marcha un plan piloto para permitir la venta de cocaína con fines recreativos, como una manera radical para combatir el narcotráfico.
La idea fue apoyada por el Parlamento de Berna, pero no por el gobierno de la ciudad, pues requeriría un cambio a la actual legislación, de acuerdo con la agencia de noticias estadunidense Reuters.
En Oregón, Estados Unidos, se despenalizará la posesión de esta droga sintética en pequeñas cantidades; España, Italia y Portugal ya no imponen penas de prisión por posesión de drogas, incluida la cocaína.
“La guerra contra las drogas ha fracasado y tenemos que buscar ideas nuevas. El control y la legalización pueden ser mejores que la mera represión”, consideró Eva Chen, miembro del consejo de Berna del Partido Alternativo de Izquierda, quien lanzó la propuesta.
De toda Europa, Suiza es el país con mayores niveles de consumo de cocaína, pues mientras sus consumidores crecen sus precios han disminuido a la mitad, según la organización o gubernamental Addiction Switzerland.
“En Suiza hemos tenido mucha cocaína a precios más baratos y con la mayor calidad que jamás hayamos visto. Hoy en día se puede conseguir una dosis de cocaína por unos 10 francos (200 pesos mexicanos), no mucho más que el precio de una cerveza”, indicó.
Por su parte, la Dirección de Educación, Asuntos Sociales y Deportes de Berna prepara un informe sobre un juicio a la cocaína porque pone en riesgo la vida de los consumidores primerizos como de los experimentados.
“Las consecuencias de una sobredosis de una sobredosis, pero también la intolerancia individual incluso a cantidades más pequeñas, pueden provocar la muerte”, indicó el gobernador de Berna, quien consideró que el país todavía está lejos de la legalización, aunque no de nuevos enfoques y, por eso, solicitaron un ensayo piloto supervisado científicamente.