La Jornada
Madrid. La derecha y la extrema derecha española congregaron en Madrid a decenas de miles de personas contra el gobierno de coalición del socialista Pedro Sánchez, para lo que hicieron un llamamiento a la “rebelión” y en contra de la aprobación inminente de la ley general de amnistía, que se aprobará en el Congreso de los Diputados el próximo martes. El líder del derechista Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijoo, aseguró durante su discurso que “vamos a derribar un muro construido con ignorancia y mentiras, y lo haremos con la verdad, con la Constitución y unidos todos”.
En la primera protesta de esta año contra el gobierno, la derecha reunió a más de 50 mil personas, según la Delegación del gobierno, y más de 70 mil, según los organizadores. El acto central se llevó a cabo en la céntrica Plaza de España de la capital española, con lo que en las calles aledañas, entre ellas la Gran Vía, Ferraz y Princesa, se desbordaron de personas que portaban banderas españolas y carteles contra Sánchez, su gobierno y contra los independentistas catalanes que serán favorecidos por la ley de amnistía, sobre todo de Carlos Puigdemont, el ex presidente catalán que lideró la declaración fallida de independencia de octubre del 2017.
Los últimos movimientos del presidente Sánchez en sus alianzas con los partidos nacionalistas catalanes, sobre todo sus negociaciones en torno a las enmiendas a la ley de amnistía que se debatirá y se votará el próximo martes, encendieron aún más la cólera y el malestar de la derecha española. Sobre todo que se incluyeron entre los delitos a ser amnistiados algunos que rozan o entran directamente en la legislación antiterrorista. El objetivo del gobierno y sus socios de coalición, Sumar, es aprobar una ley que abarque a todos los procesados y condenados por su participación en el proceso de secesión catalán desde el año 2012 hasta la fecha.
A la masiva manifestación de Madrid acudieron prácticamente todos los líderes nacionales y regionales del PP, incluidos algunos destacados presidentes autonómicos, como el andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla, la madrileña Isabel Díaz Ayuso, el valenciano Carlos Mazón y los ex presidentes del gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy.
Durante su discurso, Núñez Feijoo señaló “aquí estamos a este lado del muro protegiendo nuestros derechos frente a quienes quieren recortarlos, defendiendo la libertad de todos los ciudadanos, la ley y la Justicia. Vamos a derribar un muro construido con ignorancia y mentiras, y lo haremos con la verdad, con la Constitución y unidos todos”.
Además, el líder del PP hizo un llamado a la “rebelión” frente al gobierno de la coalición de izquierda, al sostener que “ningún español, viva donde viva y vote lo que vote, merece la mísera política, económica y moral. Vamos a rescatar democráticamente este país. No van a poder con todos los que defendemos la Constitución y la democracia. Los españoles tenemos derecho a decidir, claro, pero todos los españoles. Tenemos derecho a decidir que no nos gobiernen las minorías ni nos mientan en la calle todos los días, que no haya españoles de primera y de segunda. Esta es la prueba de la resistencia de España, por más que la quieran subastar, no se va a romper”.
La presidenta madrileña y una de las políticas de la derecha con más influencia, Díaz Ayuso, señaló por su parte durante la protesta que “el Gobierno redacta leyes a conveniencia para aquellos que han cometido los peores delitos. Y dicen que hay terrorismo bueno, porque quieren confundir vandalismo con terrorismo”.
El presidente Sánchez, a través de una entrevista en el diario catalán La Vanguardia, tildó a los manifestantes de “fachosfera”, además de catalogar a la oposición de “desnortada” y “faltona”. “El esfuerzo por normalizar la situación en Cataluña hace que nuestra democracia sea más fuerte al incorporar a Junts y a ERC a contribuir de forma constructiva a la gobernabilidad del país”.