Decenas de miles de citas y operaciones programadas se cancelarán durante el paro de los médicos residentes —aquellos que están iniciando su profesión— en Inglaterra y Gales, según los gestores del servicio.
LONDRES (AP) — Miles de doctores abandonaron el miércoles sus puestos de trabajo en Reino Unido en el inicio de una huelga de seis días que será la más larga en la historia del Servicio Nacional de Salud.
Decenas de miles de citas y operaciones programadas se cancelarán durante el paro de los médicos residentes —aquellos que están iniciando su profesión— en Inglaterra y Gales, según los gestores del servicio. Los doctores, que forman la columna vertebral de la atención hospitalaria y clínica, tienen previsto mantener la huelga hasta las 7 de la mañana del martes.
Se ha movilizado a médicos veteranos y a otros profesionales para cubrir los servicios de urgencias, de cuidados intensivos y de maternidad.
Julian Hartley, director ejecutivo de la organización de directivos de salud NHS Providers, apuntó que la huelga se produce en uno de los momentos más complicados del año para el servicio público de salud, “inmediatamente después del periodo de Navidad y Año Nuevo debido a la presión de la demanda, y por supuesto a la gripe y al Covid”.
“Así que el impacto en los pacientes será significativo”, agregó.
Gran Bretaña lleva un año de huelgas continuas en todo el sector sanitario, que reclama alzas salariales para enfrentar los costos de vida. El sindicato señaló que los salarios, sobre todo en el sector público, han disminuido en términos reales en la última década, y una inflación de dos dígitos a finales de 2022 y principios de 2023, avivada por los crecientes precios de los alimentos y la energía, dejó a muchos trabajadores batallando con las cuentas.
El sindicato señaló que los médicos recién titulados ganan 15,53 libras (19,37 dólares) la hora —el salario mínimo en Gran Bretaña es de poco más de 10 libras (12 dólares) la hora— aunque los sueldos suben rápidamente tras el primer año.
En una protesta afuera del Hospital St. Thomas en el centro de Londres, la doctora Georgia Blackwell, de 28 años, dijo que el estrés y los bajos salarios estaban llevando a muchos médicos a tomar empleos en el extranjero.
“Muchos médicos se están mudando a Australia, no sólo por el sueldo, sino también porque el equilibrio trabajo-vida es mejor”, comentó.
Las huelgas han puesto a prueba al ya de por sí saturado sistema público de salud, que todavía trata de recuperarse de los retrasos causados por la pandemia del coronavirus.
Enfermeras, personal de ambulancia y médicos veteranos han alcanzado acuerdos salariales con el gobierno, pero el sindicato que representa a los residentes rechazó las propuestas y las negociaciones se han estancado. El gobierno dice que no dialogará más a menos que se desconvoque la huelga, mientras que el sindicato afirma que no negociará a menos que reciba una oferta “creíble”.
El sindicato señaló que el sueldo de los médicos residentes ha sido recortado más de un tercio desde 2008.
«No queremos que se tenga la idea de que estamos empeñados en convocar huelgas», dijo el doctor Vivek Trivedi, copresidente del Comité de Médicos Residentes de la Asociación Médica Británica. “Lo que queremos es negociar una oferta que podamos presentar a nuestros afiliados y que puedan aceptar”.