*Trabajadores piden urgentemente la intervención de la gobernadora electa Rocío Nahle García y del próximo secretario de Salud, doctor Valentín Herrera Alarcón.
*Exhiben nombres de los presuntos funcionarios involucrados.
*Señalan que llevan años saqueando la dependencia encargada de la salud de los veracruzanos.
Por: Jeremías Trejo González
A través de un comunicado un grupo de trabajadores de la Secretaría de Salud del Estado de Veracruz, denuncian presuntos actos de corrupción al interior de la dependencia. Buscan que la información llegue a oídos de la gobernadora electa Rocío Nahle García y al próximo secretario de Salud, doctor Valentín Herrera Alarcón, con la esperanza de que, asumiendo sus respectivos cargos el 1 de diciembre próximo, investiguen y apliquen todo el peso de la ley a quienes resulten responsables.
En una misiva, los trabajadores exponen lo siguiente:
Respetable Gobernadora Electa del Estado de Veracruz, Ing. Rocío Nahle García, próximo Secretario de Salud, Dr. Valentín Herrera Alarcón y a toda la población en general, para que puedan tener conocimiento, investigar y enmendar todos los actos de corrupción y anomalías perpetrados en la Secretaría de Salud del Estado de Veracruz.
Agregan:
Desde que la Dra. Guadalupe Díaz del Castillo Flores era subdirectora, se valió de su posición para beneficio propio, colocando a amigos y familiares en puestos estratégicos. Tras ascender a secretaria de salud, continuó con estas prácticas, llegando a contratar a su esposo como chofer y escolta personal, a una niñera a cargo de la dependencia y rodeándose de allegados, todo a su conveniencia.
La Directora de Salud Pública, Dra. Jessica Kristal Ríos, heredó su puesto de su amiga, la secretaria de salud, y no ha dudado en seguir su ejemplo, rodeándose de familiares y amigos, abusando de su autoridad y actuando con prepotencia hacia los empleados.
En la Dirección de Riesgos Sanitarios, a pesar de las protestas y represalias sufridas por quienes reclaman sus derechos, la situación no ha mejorado. Continúan las denuncias de favoritismo y nepotismo, y se rumora que el ex director, supuestamente despedido, sigue operando desde afuera.
La Dirección de Atención Médica se salva de la corrupción por estar bajo el control del nuevo régimen IMSS Bienestar.
La Dirección de Infraestructura, bajo el mando de la Arq. Karla Peregrina, amiga y ex compañera de docencia del gobernador actual, ha sido utilizada para beneficiar a conocidos y amigos, adjudicándoles contratos a empresas pertenecientes a los mismos jefes de la dirección.
La Dirección Jurídica, bajo la dirección de la actual funcionaria (cuyo nombre no se menciona), se caracteriza por la corrupción en las solicitudes de laudos, los cuales se expiden rápido solo a cambio de «mochada».
La Dirección Administrativa, liderada por el Lic. Jorge Eduardo Sisniega, es la que concentra los actos de corrupción más descarados. Sisniega, al parecer dueño de una constructora, opera las finanzas de la secretaria a su antojo, metiendo empresas de amigos, familiares y de él mismo con prestanombres, para vender todo tipo de productos y servicios. Este personaje, perteneciente al grupo más grande y popular del movimiento de Morena, ha utilizado la dependencia para hacer acarreo a los mítines del gobierno, obligando a personal de contrato a asistir si quieren conservar su trabajo. Incluso se rumora que ha dado la espalda a la gobernadora electa al apoyar a un candidato contrario.
Entre sus colaboradores destacan:
– Lic. Isaac Ramírez, secretario particular de Sisniega, quien invadió el Hospital Civil con su familia y ha robado a discreción, pasando de un «vochito» a una Maverick del año.
– Martha Verónica Durante, encargada del departamento de Gestión Administrativa, quien se destaca por su prepotencia y sus arreglos con el subsecretario de Ingresos de Finanzas.
– Abraham Molina, quien se ha enriquecido con la corrupción en servicios subrogados, realizando negocios hasta con el área de mantenimiento, creando comisiones falsas y aprovechándose de los empleados.
– El Ing. Gian, quien colocó a su novia como encargada del área de archivo y se pasea por los pasillos en su carro como si fueran dueños de la empresa, no empleados de gobierno.
En el departamento de Tecnologías, dirigido por el Lic. Jonathan Edén Hernández (sin experiencia previa), se ha instalado una red de corrupción en complicidad con el director de Innovación Tecnológica de Sefiplan, Jesús Neftalí. Se contratan programadores con presupuesto de la dependencia para trabajar en sistemas que posteriormente se venden a Sefiplan y otras empresas. Se compra equipo y servidores a sobreprecio, se contratan servicios de infraestructura y equipamiento, etc. Todo esto se realiza con la empresa GDS (Grupo Desarrollador de Sistemas), propiedad de Jaime Antonio Sánchez.
Cabe destacar que el expediente médico electrónico, que no opera formalmente en los centros de salud ni hospitales, se adquirió a través de un proceso que regula tecnologías de información, pero no para lineamientos o normas, sino para beneficio propio y de la empresa GDS. La empresa utiliza dos o más empresas ligadas al mismo propietario para ganar licitaciones y asegurar su beneficio.
El jefe de tecnologías, quien metió a su hermano en los almacenes de la central de abasto, también ha sido señalado como responsable del hackeo a los sistemas y la pérdida de información. Aunque se culpó al ex secretario de Salud, Ramos Alor, de ordenar la destrucción de la información, fue el director administrativo quien dio la instrucción para lavar su propia culpa.
En la Subdirección de Recursos Materiales, a cargo del Lic. Valdivia, se ha implementado una red de corrupción en las adquisiciones, almacenes y transportes, en complicidad con los encargados de estas áreas. Se vende autopartes, y la jefa de transportes, Sonia Rivera, quien era la particular de Valdivia en tiempos pasados, ahora le sirve a su antojo.
En la parte financiera, han pasado muchos personajes con historial corrupto. La subdirectora de Financieras, Mireya Domínguez, y el acosador Julio Lezama, en complicidad con el jefe de sistematización Héctor Roa, se han encargado de reclutar «talacheros» del futbol fingiendo ser trabajadores de la dependencia, para competir en torneos inventados y lavar dinero del primo y hermano del gobernador.
La subdirectora de Recursos Humanos, al principio, trajo a su gente a puestos estratégicos para su beneficio propio, metiendo a familiares y apropiándose de plazas. Entre sus cómplices destaca Guadalupe Estrella González, Tania Herrera y otros. El esposo de la subdirectora, José Luis Ávila, titular de Transparencia, fue colocado ahí para tapar las anomalías de su esposa y el director administrativo. La adjudicación de plazas o bases se realiza en colusión con el sindicato de los Trabajadores de Salud en su Sección 26, liderado por el enfermero Antonio Ortiz.
Este sindicato, patrocinado por el director administrativo, le ha brindado al líder sindical operaciones para su esposa, una camioneta nueva, viajes al extranjero y otras riquezas que ha acumulado gracias a la corrupción. A cambio, se han otorgado plazas a las personas antes mencionadas o se han mejorado sus condiciones laborales. Los empleados que sueñan con un crecimiento laboral son víctimas de este sistema corrupto.
Por último, estos empleados informes con tantas anomalías y corruptelas reiteran: «se espera que la gobernadora electa, Rocío Nahle, y el próximo secretario de salud, Dr. Valentín Herrera Alarcón, tomen cartas en el asunto y pongan fin a esta red de corrupción que ha afectado gravemente a la salud de los veracruzanos».
Hasta aquí el comunicado de los trabajadores de la Secretaría de Salud del Estado de Veracruz.
#Rocionahle
#ClaudiaSheinbaum
#Secretariadesaluddeveracruz
#Fotoreportexalapa #COMPARTEYSIGUENOS #Xalapa #Enterate #Veracruz #mexico
#CuitláhuacGarcíaJiménez